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Recomendaciones generales

A continuación se ofrecen algunos consejos para una buena gestión de la aproximación radar

Recomendaciones generales

  • Briefing: Estudiar bien el aeropuerto y espacio aéreo en el que vamos a controlar. MRVA, terreno circundante, tipos de aproximación, pistas preferentes, posibles conflictos entre salidas y llegadas o dos salidas, procedimientos locales, etc.

  • Saber anticiparse al tráfico y a los potenciales conflictos: vigilancia radar

  • Mantener el tráfico ordenado y manejarlo con rapidez (no demorarlo de manera innecesaria) dentro de los márgenes de seguridad adecuados.

  • No es recomendable que las aeronaves se encuentren distanciada por la separación mínima en ningún momento ¡Establece márgenes de seguridad!

  • Tener un plan y ejecutarlo con las herramientas a tu disposición y la flexibilidad adecuada.

  • Realizar las transferencias en tiempo (punto de transferencia correcto, con antelación al límite horizontal o vertical) y forma (separación acordada)

  • Facilitar las aproximaciones estabilizadas

  • Mejorar la conciencia situacional de las tripulaciones (informar de los motivos de las demoras o de la guía vectorial, información de tránsito, etc.). ¡Trabajo en equipo!

  • Utilizar fraseología impecable, que no de lugar a dudas y sea concisa.

  • Gestionar la frecuencia de forma que se evite que "petaqueo", priorizando comunicaciones y anticipándose a las necesidades del tráfico.

  • Actuar con decisión y seguridad.

  • Siempre tener un "Plan B" ante posibles imprevistos.

Guía vectorial y secuencia de aproximación

  • Tener muy presente la MRVA antes de sacar a una aeronave de un procedimiento publicado. ¡No vectorizar por debajo de mínimas!

  • Decidir una secuencia de aproximación con antelación: según la situación, valorar si merece la pena «colar» aviones en secuencia; o si, por el contrario, es más conveniente ponerlos "a la cola" aún empeorando la mínima demora media.

  • Usar vectores para separar y ajustes de velocidad para mantener esa separación.

  • Ajustar la velocidad del tráfico si vemos que, a la velocidad actual, su viraje va a ser demasiado abierto.

  • No dar vectores finales que formen más de 45º (idealmente 30º), con respecto a rumbo de aproximación final, ni demasiado cerca de la interceptación de la senda o tramo de descenso final.

Control de la velocidad:

  • No utilizar el control de velocidad salvo que sea necesario. ¡Deja volar a la tripulación!

  • En entornos congestionados, ejecuta un control de velocidad sistemático como forma de trabajo, siendo flexible en casos que lo permitan. Evita alternar reducciones y aumentos de velocidad excepto cuando sea absolutamente imprescindible.

  • Asiste al piloto proveyendo información (millas hasta la toma, localizador, millas o minutos hasta vector final...)

  • Abusar del control de velocidad es contraproducente, ya que el efecto que tiene un ajuste de velocidad en concreto no tiene lugar de forma inmediata.

  • ¡RECUERDA! Toda restricción de velocidad instruida por ATC ha de ser cancelada explícitamente por ATC cuando ya no se necesite.

Esperas

  • Utiliza las esperas siempre que sea necesario. No utilices las esperas cuando no sea necesario: ni más, ni menos.

  • Instruye las esperas con antelación y da información de las mismas cuando no estén publicadas.

  • Proporciona una EAT lo más pronto posible, y siempre si la espera va a ser de más de 10 minutos.

  • Ten en cuenta el área que abarcan las aeronaves en esperas, incluyendo si pueden ser conflicto con otras rutas o con despegues.


    Autores: 215727 y 327085